miércoles, 27 de agosto de 2008

El Gobierno comenzará a rescatar deuda por licitación


Será a partir de mañana. El Gobierno no quiere que haya demasiados oferentes, porque eso implicaría que muchos inversores quieren seguir vendiendo sus bonos. Al mismo tiempo, busca que la operación, tal como lo buscaron las compras de las últimas semanas, ayude a subir el precio de los títulos públicos que vencen este año y el próximo.

Buenos Aires, Argentina.- El Gobierno activó ayer el esquema de recompra de deuda mediante licitaciones a través de una resolución conjunta de la Secretaría de Hacienda y la de Finanzas, publicada ayer en el Boletín Oficial. La primera operación se hará mañana. El monto se informará hoy, aunque se prevé que sea una suma acotada, según informaron fuentes oficiales.

En las últimas dos semanas, con el objetivo de calmar al mercado y bajar el riesgo país, el Gobierno avanzó con la adquisición de US$ 370 millones en bonos.

Según la resolución conjunta 212/2008 y 24/2008 de las secretarías mencionadas, publicada ayer en el Boletín Oficial, para cada licitación, la Oficina Nacional de Crédito Público remitirá a la Subsecretaría de Financiamiento una propuesta con las características de la compra de los bonos de deuda pública, detallando el monto por utilizar para la compra, los instrumentos elegibles, las comisiones, la fecha del llamado a licitación, el límite de recepción de ofertas, la fecha de liquidación, el sistema de adjudicación y la oferta mínima.

La Subsecretaría de Financiamiento analizará la propuesta y, con su aprobación, la Oficina de Crédito Público activará la licitación mediante un comunicado de prensa, con una antelación mínima de un día hábil a la fecha en que se haga cada licitación. Las ofertas para adquisición de los valores deberán realizarse en firme por intermedio del Mercado Abierto Electrónico (MAE).

El Gobierno ha logrado mantener el superávit fiscal en torno del 3% del producto bruto interno (PBI) en los últimos meses, un monto que garantiza el pago de los intereses de la deuda. No obstante, la desconfianza en la política económica ha generado dudas sobre la capacidad de pago.

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